El joven participa en la película inspirada en la Ruta del Bacalao
Sara Guillamón. Castelló
Sergio Castillo es un joven ondense de 26 años. Actualmente se está formando para ser actor y hace unos días terminó de rodar su primera película titulada Quan no acaba la nit en la que interpreta al personaje principal.
La espontaneidad, la honestidad y la capacidad de trabajo junto a la entrega y pasión por la actuación que manifiesta Sergio le facilita la interpretación de cualquier personaje. Aunque el joven actor recalca que a veces es "una persona bastante insegura" y que eso le ha hecho pensar algunas veces en dejar su formación, pero esta idea se le va de la cabeza al darse cuenta de que tal y como expresa él mismo: "queda mucho por aprender y mucha gente de la que aprender". Sergio Castillo en la Plaza de la Sinagoga de Onda.
La inseguridad, afirma Sergio, vuelve a surgir cuando su amigo Kevin y él acudieron a una charla que hacía un director de cine y a la salida un jefe de casting le paró por la espalda para animarle a que se presentara a un proceso de selección para una película. El joven, gracias a su ambición se presentó en Valencia para luchar por el papel y comenzó a superar fases del casting hasta conseguir el papel de Fran, el personaje principal a pesar de que, tal y como afirma el actor, había "muchísima competencia".
Sergio define a Fran, como alguien "ambicioso, con muchos amigos" y líder de su "grupito de amigos". También destaca el carácter extrovertido aunque algo agresivo y sus "ganas de ganarse la vida por sí mismo" que muestra su personaje. Para el actor fue fácil reflejarse en Fran: "La ambición era el nexo en común entre Sergio y Fran", afirma el joven, "soy muy ambicioso con lo que quiero en la vida, igual que él", reafirma. Sergio relata que interpretar a este personaje fue un reto porqué él no se siente líder en su vida a diferencia de Fran, ni tampoco es seguro de sí mismo y mucho menos trapichea y juguetea con las drogas, como sí que hace el protagonista de la película.
"Ha sido de lo más bestia», «ha sido una experiencia increíble", "ha sido muy intenso pero súper positivo", así describe Sergio su primera experiencia grabando una película. Mantener el ritmo de rodaje no es algo fácil y menos si eres un actor sin experiencia previa, por eso, Sergio cuenta que para las "12 horas diarias más o menos de rodaje tenía que poner mucha energía y estaba soportando mucha presión" al ser su primera experiencia. Además, reconoce que muy probablemente habrá cometido muchos errores pero que le han servido para seguir aprendiendo aunque haya sido "a marchas forzadas", explica. El actor ondense, define esta primera experiencia cinematográfica "como si hubiese sido un máster" gracias a la cantidad de conocimiento que manifiesta haber recibido.
Sergio Castillo, se siente muy agradecido con Victor Antolí, ese jefe de casting que le animó a presentarse al proceso de selección y por eso "le daría un gracias en mayúscula y negrita por haber confiado en mí", expresaba el actor. "Sin su confianza no hubiera sido posible" y "que apostara por mí es algo que no olvidaré en la vida", añadía el joven.
Ser actor no es fácil y meterse en la piel de cada personaje para darle vida tampoco, pero Sergio lo define como un "juego en el que observas hasta dónde puedes llegar siendo otra persona". Aunque para este joven actor ondense no es fácil elegir qué tipo de personajes son sus favoritos, los que más disfruta interpretando son aquellos a los que les puede dar un toque de humor mientras cuentan una historia dramática. "El tocar el humor dentro de lo dramático es algo que me flipa", explica Sergio, "porque hace que el público se divierta mientras le cuentas una situación complicada", añade. Poder interpretar este tipo de personajes le permite al actor plasmar lo que él define como "su energía personal" la cual define como "bastante cómica" y así "darle ese toque Sergio a cada personaje que al final es lo que diferencia la interpretación de un actor a otro", explica.
Ahora que Sergio Castillo conoce el mundo del teatro y el rodaje cinematográfico puede elegir cuál de los dos escenarios es más de su agrado. Por ahora, el actor prefiere los escenarios tradicionales porque considera que domina más ese mundo y expresa que siente "una mayor seguridad" y que allí tiene "una libertad que a veces el cine no da porqué hay más cosas que controlar" a las que él, por ahora, no está acostumbrado. Además, el joven ondense añade que a día de hoy prefiere el teatro porque se siente más cómodo y domina mejor los códigos de este mundo de la interpretación. A pesar de ello, no descarta en ningún momento que los rodajes y las cámaras lleguen a gustarle más que un escenario teatral si continúa su formación cinematográfica.
A día de hoy los planes de futuro que tiene Sergio Castillo en su recorrido profesional son variados. A corto plazo quiere tomarse unos días de descanso tras el mes del rodaje del film Quan no acaba la nit, aunque el actor comenta que en dos semanas ya subirá de nuevo a los escenarios para llevar a cabo varios bolos teatrales. A medio plazo, quiere terminar el trabajo final de sus estudios en la Escuela Superior de Arte Dramático de Valencia, también conocida como ESADV. Y, a largo plazo, le gustaría seguir formándose en la ciudad que le vio convertirse en actor, Valencia, y adentrarse en la capital española, Madrid. Allí, Sergio ve muchas oportunidades para seguir creciendo profesionalmente, a pesar de reconocer que todavía no sabe cómo funciona el mundo de la interpretación y los procesos de casting por los madriles, a lo que el actor manifiesta que tiene curiosidad por conocer. Además, como proyecto de vida interpretativa, a Sergio Castillo le gustaría estar en continuo proceso de formación ya que se considera un gran defensor de la idea de que un actor debe estar permanentemente entrenando su interpretación "para ir mejorando y así conseguir oportunidades para demostrar su mejoría", afirma rotundamente.